lunes, 10 de agosto de 2009

Habia una vez un rey que tenia cuatro esposas (Es algo largo pero te aseguro que cuando termines de leerlo habra valido la pena)


Habia una vez un rey que tenia cuatro esposas. El amaba a su cuarta esposa mas que a las demas y la adornaba con ricas vestiduras y la complacia con las delicadezas mas finas. Solo le daba lo mejor. Tambien amaba mucho a su tercera esposa y siempre la exhibia en los reinos vecinos. Sin embargo, temia que algun dia ella se fuera con otro. Tambien amaba a su segunda esposa. Ella era su confidente y siempre se mostraba bondadosa, considerada y paciente con él. Cada vez que el rey tenia un problema, confiaba en ella para ayudarle a salir de los tiempos dificiles. La primera esposa del rey era una compa~era muy leal y habia hecho grades contribuciones para mantener tanto la riqueza como el reino del monarca. Sin embargo, él no amaba a su primera esposa y aunque ella lo amaba profundamente, apenas él se fijaba en él. Un dia, el rey enfermo y se dio cuenta de que le quedaba poco tiempo de vida. Penso acerca de su vida de lujo y derroche "Ahora tengo cuatro esposa conmigo pero, cuando muera, estaré solo." Asi que le pregunto a su cuarta esposa: "Te he amado mas que a las demas, te he dotado con las mejores vestimentas y te he cuidado con esmero. Ahora que estoy muriendo,...estarias dispuesta a seguirme y ser mi compa~ia?" "Ni pensarlo!",contesto la cuarta esposa y se alejo sin decir mas palabras. Su respuesta penetro en su corazon como un cuchillo filoso. El entristecido monarca le pregunto a su tercera esposa: "Te he amado toda mi vida; Ahora que estoy muriendo, ... estarias dispuesta a seguirme y ser mi compa~ia?" "No!", contesto su tercera esposa. "La vida es demasiado buena!... Cuando mueras, pienso volverme a casar!". Su corazon experimento una fuerte sacudida y se puso frio. Entonces pregunto a su segunda esposa: "Siempre he venido a ti por ayuda y siempre has estado alli para mi. Cuando muera, ...estarias dispuesta a seguirme y ser mi compa~ia?" "Lo siento, no puedo ayudarte esta vez!", contesto la segunda esposa. "Lo mas que puedo hacer por ti es enterrarte". Su respuesta vino como un relampago estruendoso que devasto al rey. Entonces escucho una voz: "Me iré contigo y te seguiré donde tu vayas". El rey dirigio la mirada en direccion de la voz y alli estaba su primera esposa. Se veia tan delgaducha, sufria de desnutricion. Profundamente afectado, el monarca dijo:"Debi haberte atendido mejor cuando tuve la oportunidad de hacerlo!". En realidad, todos tenemos cuatro esposas en nuestras vidas. Nuestra cuarta esposa es nuestro cuerpo fisico. No importa cuanto tiempo y esfuerzo invirtamos en hacerlo lucir bien, nos dejara cuando muramos. Nuestra tercera esposa es nuestras posesiones, condicion social y riqueza. Cuando muramos, iran a parar a otros. Nuestra segunda esposa es nuestra familia y amigos. No importa cuanto nos hayan sido de apoyo a nosotros aqui, lo mas que podran hacer es acompa~arnos hasta el sepulcro. Y nuestra primera esposa es nuestra relacion con Jehova, frecuentemente olvidada en la busqueda de la fortuna, el poder y los placeres del ego. Sin embargo nuestra relacion con Jehova es la unica que se va con nosotros. Asi que... cultivala, fortalecela y cuidala ahora! "Dejen de acumular para si tesoros sobre la tierra, donde la polilla y el moho consumen, y donde ladrones entran por fuerza y hurtan. Mas bien, acumulen para si tesoros en el cielo, donde ni polilla ni moho consumen, y donde ladrones no entran por fuerza y hurtan. Por que donde esté tu tesoro, alli tambien estara tu corazon. (Mateo 6:19-21) Muestrales este mensaje a otros quizas necesiten que les recuerdes qué es lo que de verdad vale la pena en este mundo. Gracias a mi querida cu~ada, hermana y amiga: Nivia Colon. TE QUIERO MUCHO CU~IS ☺